Cómo hacer un análisis DAFO para conocer la situación de tu empresa

Hemos hablado más de una vez de la importancia que tiene tener una estrategia para nuestra empresa. De hecho, debería ser el primer paso antes de ponernos a realizar acciones concretas.

Es decir, conocer, investigar y poner orden; tres pasos clave para cualquier empresa (da igual el tamaño o el sector) antes de ponernos a crear una página web, abrir perfiles en redes sociales o incluso, diseñar el logotipo.

Crear una estrategia de comunicación para tu empresa, debe ser el primer paso, pero si ya te has echado a andar, y estás leyendo este artículo, y te oyes decirte a ti mismo “Yo la estrategia no la tengo hecha” no pasa nada, lo más importante es darse cuenta (ya lo has hecho) y después ponerse a ello. ¡Todavía estás a tiempo!

Hoy no me quiero centrar en cómo hacer una estrategia digital, para eso, te invito a que bucees por el blog de TTANDEM y descubras los diferentes artículos que ya hay escritos en torno a este tema. Estoy segura de que te van a resultar muy útiles.

A lo que venía yo hoy, era a hablar sobre el análisis DAFO, una herramienta muy útil que se integra siempre dentro de las estrategias. Normalmente, como te digo, suele ser una parte que se desarrolla dentro del propio documento de la estrategia, pero también se puede utilizar como herramienta aislada. Por eso, este artículo, porque creo que te puede resultar muy interesante para analizar la situación interna y externa de tu empresa.

Gracias al analisis DAFO, podremos analizar la situación interna y externa de un proyecto y conocer la situación actual de la empresa en el mercado.

Análisis de la situación

El analisis DAFO nos va a permitir analizar la situación de nuestra empresa, tanto la situación externa como la interna. Para poder hacerlo, tendrás que utilizar todas las herramientas que tengas a tu alcance, como: encuestas, datos de mercado, noticas del sector, etc. No vale hacer suposiciones.

Seguramente ya tendrás una idea de lo que está pasando o lo que va a pasar, pero siempre que analicemos la situación de nuestra empresa, es imprescindible investigar. La labor de investigación, en todo plan estratégico es vital. La investigación y la concreción. Cuanto más concreto plasmemos todo, mejor.

• Análisis externo: en este apartado hay que analizar el perfil del consumidor y la competencia de la empresa. Además, también es necesario analizar el entorno general de la empresa: análisis demográfico, social, político, sociocultural, etc.
  Dentro del análisis externo, también se analiza el entorno cercano de la empresa: competencia, clientes, proveedores, etc. Es importante investigar sobre cómo se puede ampliar el mercado de la empresa y las tendencias actuales del mercado.
• Análisis interno: en este apartado es necesario que reflexiones sobre la empresa. Es decir, la finalidad de la empresa, objetivos, punto de vista y valores. Así como también, detallar la estrategia general de la empresa (ejes estratégicos) y definir cuál es la ventaja competitiva frente a la competencia. En este apartado también, puedes hacer un análisis de todas las personas que conforman la empresa, quehaceres respecto al tema de la comunicación y el marketing, etc.

¿Qué es un análisis DAFO?

Ahora que ya tenemos claro qué analizar respecto a la empresa, vamos a concretarlo utilizando la herramienta DAFO.

Las siglas, DAFO hacen referencia a: debilidades, amenazadas, fortalezas y oportunidades. En inglés, igual te suena, es SWOT; Strength, Weakness, Oportunities y Threats.

Y lo más importante, tienes que tener en cuenta que unos aspectos hacen referencia a los aspectos internos y otros de lo externo:

• Las debilidades y las fortalezas corresponden a lo interno (de origen interno)
• Las amenazadas y las oportunidades corresponden a lo externo (de origen externo)

Lo que más me gusta de esta herramienta, es que todo el análisis realizado se coloca en una cuadrícula de 2×2, lo que permite de un solo golpe de visita ver de forma clara los aspectos más importantes de este análisis. Yo incluso, le suelo dar color a cada cuadrícula, lo que me permite asociar los conceptos mucho mejor.

Veamos en detalle cada término. A mí me gusta abordarlos con diferentes preguntas:

Análisis interno:

• Debilidades: Áreas de mejora de tu empresa. ¿Qué límites tiene tu empresa? ¿Qué carencias consideras que tiene? ¿Qué aspectos negativos tiene? ¿Qué podemos mejorar? ¿Qué aspectos debemos mejorar según la opinión de nuestros clientes?
• Fortalezas: Tu ventaja competitiva. Esas fortalezas internas que tenga tu empresa y que puedas usarlas en tu favor. ¿En qué aspectos te diferencias frente a tu competencia?

Análisis externo:

• Amenazas: Aspectos que no están bajo tu control y que pueden afectar a tu empresa. Por ejemplo: mercado, la bolsa, la política, las pandemias sanitarias, etc. ¿Para qué situación no está preparada mi empresa? Pregúntate también, ¿Qué está haciendo tu competencia?
• Oportunidades: Los mismos aspectos externos que en el apartado amenazas (mercado, bolsa, política, situación sanitaria, etc.) pero que afectan a nuestra empresa de manera positiva. En este punto también es interesante echar un vistazo a las tendencias emergentes de tu sector.

Algunos ejemplos

Con la idea de ser más concreta y poder ayudarte a realizar tu análisis, te dejo aquí algunos ejemplos de cómo puedes completar la cuadrícula DAFO:

Debilidades:

1. Tienda online anticuada
2. Gastos de envío no gratuitos
3. Carencias en la identidad visual

Fortalezas:

1. Fácil adaptación a distintos clientes en países diferentes
2. Producción rápida
3. Alta cuota de mercado

Oportunidades:

1. Posibilidad de abrirse a nuevos mercados
2. Disponibilidad de recursos naturales
3. Mejora en los hábitos de consumo

Amenazas:

1. Alta competencia
2. Brecha digital
3. Existencia de productos sustitutivos

Una vez hecho el análisis y completado la tabla, podrás corregir las debilidades, hacer frente a las amenazas, mantener las fortalezas y sacar provecho a las oportunidades. ¿Cómo lo ves? ¿Te parece útil esta herramienta?

Como te habrás fijado ahora que ya estás al final del artículo, es que hacerlo bien, es una tarea ardua, pero te habrás dado cuenta también, que es una de las más importantes dentro de un plan estratégico. Y que una vez, hecho, valdrá oro.

¡No lo dudes, y ponte manos a la obra!