Test A/B o test multivariante: ¿cuál es más adecuado?
Realizar un test A/B o multivariante en tu sitio web es la mejor forma de conocer qué elementos funcionan mejor. Mediante herramientas de medición como Google Analytics puedes lanzar dos versiones de y observar cuál de ellas obtiene una mejor respuesta por parte de los usuarios.
Con estas pruebas puedes optimizar la ratio de conversión de tus landing pages, tu estrategia de email marketing o los procesos de compra, entre otras cosas. Aunque existen diferentes tipos de test, los más habituales son los tests A/B y los tests multivariante.
¿No sabes cuál aplicar a tu sitio web? Te explicamos cómo funcionan ambos para que puedes decidir el que mejor se adapta a tu caso.
Para qué sirve un test A/B o multivariante
Si te estás preguntando para qué te puede servir un test, aquí tienes algunas de sus ventajas:
Mejorar la confianza en tu sitio web
Uno de los elementos que más influyen en el CRO es la confianza que tu sitio web transmite a los usuarios. Pero, ¿qué es relevante para tu audiencia? Puede que sean los sellos de calidad, los testimonios de clientes reales, la pertenencia a un grupo sólido… Los test te ayudarán a averiguarlo.
Innovar en el camino correcto
Los sitios web evolucionan tanto en diseño como en estrategias y funcionalidades. Pero hacer cambios sin una pauta no suele funcionar bien. Los test sirven para incorporar cambios de forma progresiva sabiendo lo que realmente funciona en tu caso.
Aumentar la rentabilidad de tus campañas
Los test son pruebas asequibles y sencillas para incrementar tu ROI en poco tiempo. Con ellos puedes saber qué funciona mejor para aumentar las conversiones, rentabilidad y afinar tus campañas para ganar efectividad.
Acertar con el contenido que más impacta
Con los test puede averiguar en poco tiempo cuáles son los textos que más enganchan a tu audiencia. Puedes analizar la longitud de los contenidos, el estilo de comunicación, los argumentos de venta… Todo esto lo puedes probar en los asuntos de tus emails, en las landing pages, en tu estrategia de contenidos o en los CTA.
Aunque no lo creas, cosas tan sencillas como cambiar el color de un botón, la disposición de un texto o el tamaño de una imagen pueden influir en tus conversiones.
¿Necesitas (realmente) rediseñar tu sitio web?
Ebook gratuito
Diferencias entre el test A/B y multivariante
El test A/B consiste en desarrollar dos versiones de un mismo elemento (por ejemplo, un botón CTA en dos colores o con dos textos diferentes). Posteriormente, utilizamos las métricas para analizar qué versión funciona mejor.
Una de las peculiaridades del test A/B es que solo se cambia un elemento cada vez. Por ejemplo, si estamos analizando el funcionamiento de un botón CTA, podemos variar el color, el contenido, el tamaño o la disposición. Pero solo modificamos una variante por cada prueba.
Por el contrario, en el test multivariante o MVT (multivariate testing) se prueban simultáneamente distintas combinaciones de una variable. El objetivo al modificar varios elementos a la vez es descubrir qué combinación tiene mayor impacto en nuestras conversiones.
Para utilizar el test A/B debemos centrar la atención en los elementos que influyen la conversión uno a uno. Algunos de los elementos que podemos chequear son:
- Palabras, colores, tamaños y ubicación de los CTA (botón de llamada a la acción)
- Titulares de los posts de tu blog
- Descripciones de los productos o servicios que ofreces
- Extensión y campos de los formularios
- Estructura visual de la página web
- Asuntos de los correos electrónicos
- Modo de presentación de precios y ofertas
- Cantidad de texto en una página web o en un post
Los test multivariante sirven para probar combinaciones de varios elementos. Por ejemplo, puedes crear tres versiones para dos variables diferentes, con lo que obtendrás nueve combinaciones.
¿Para qué te sirve esto? La mayoría de sitios web que realizan test multivariante tienen como objetivo chequear combinaciones de texto y color en un botón CTA o probar diferentes combinaciones de texto e imágenes en la página.
Las principal ventaja del test multivariante es que ahorras tiempo, ya que es como realizar muchos test A/B a la vez. Sin embargo, para que los test multivariante sean fiables necesitas gran cantidad de usuarios.
Por el contrario, el test A/B es muy útil para páginas con poco tráfico, como las landing pages. En este caso, el 50% de usuarios tendría acceso a la primera versión y el otro 50%, a la segunda versión.
En resumen, la analítica de un test multivariante es más compleja y requiere más tráfico. Así pues, si eres nuevo en esto de testear tu página, probablemente te resulte más sencillo comenzar con un test A/B. En ambos casos, la clave para realizar buenos test está en definir su objetivo y localizar los puntos de mejora de tu web.